Las impresoras 3D vienen ganando prestigio por los diferentes beneficios que se consiguen al margen de su alto costo. Hoy es notable como personas con ideas de avance conjugan las características de una impresión en 3D con la búsqueda de salud humana.
Actualmente cada vez son mas las empresas que apuestan fuerte por esta nueva tecnología y podréis encontrar muchos anuncios clasificados con empresas desarrolladoras de esta puntera tecnología.
Gracias a esta tecnología de generación de objetos 3D se ha conseguido implementar las llamadas carcasas 3D biomodeladas que serían por así decirlo las próximas escayolas de un futuro no distante, incluso utilizan el Kinect modificado de la consola Xbox 360 de Microsoft. ¿Os imagináis con un simple escaneo de brazos, piernas o cualquier zona rota, poder recibir de forma rápida y limpia un material acoplado perfectamente a la zona, inmovilizándola correctamente y ademas que la piel traspire para comodidad del paciente?. (La verdad es que recuerdo un verano en el que me hice un esguince en el pie y me lo escayolaron en pleno mes de agosto, y la verdad es que la sensación del calor en el pie era insoportable.)
Cortex Cast es la impresora 3D destinada a la creación de las carcasas para inmovilizar extremidades, primero se comienza por un escaneo de la zona tomando papel principal el Kinect, luego comienza el trabajo de diseño incluidos los rayos X para elegir el material más rígido según la zona afectada, todo termina con la impresión de la estructura con polígonos trabeculares para mejor ventilación.
El concepto es por el momento parte de un proyecto escolar, sin embargo el prototipo funciona, es cómodo, ligero y más limpio que las escayolas. Las piezas que podemos definir como exoesqueletos deberán pronto ser probadas con pacientes reales para buscar así mejoras en la idea, de todas formas no se debe dejar pasar este aporte para la medicina y mejora de la calidad de vida de los pacientes en tratamiento y reposo.