Cada vez son más las personas que usan el patinete eléctrico para moverse por la ciudad. Eso está haciendo que la DGT comience a tomar medidas para controlar su uso y evitar que puedan provocar accidentes. En primer lugar, se está estudiando que los conductores de los patinetes eléctricos tengan que obtener un certificado para poder circular con ellos. Según indican los expertos, el objetivo no es recaudar más dinero, sino tener un mayor control sobre los mismos.
La DGT quiere controlar los VPN
De momento no existe una gran legislación y normativa sobre los patinetes eléctricos. El problema viene dado en que los mismos cada vez están más presentes en las calles de España. Eso hace que la DGT tenga que comenzar a tomar medidas para conseguir controlarlos y evitar el abuso de los mismos.
Hay que tener en cuenta que siempre que se pueda hay que circular con el patinete por el carril bici, a una velocidad moderada y no perjudicar al resto de personas que vayan por la vía, independientemente del tipo de transporte que estén usando.
Pero la principal novedad es que dentro de poco se comenzará a solicitar un certificado. Sin ese certificado no se podrá circular. Eso significa que, dentro de poco, las personas que no tengan ese certificado no podrán circular legalmente con el patinete. Es decir, todos los amantes del patinete tendrán que adquirir el certificado si lo quieren seguir usando como hasta ahora.
¿Por qué será necesario el certificado para usar el patinete eléctrico?
Por suerte, todo indica que el certificado no será necesario hasta 2022. Y como suele ser normal, habrá un margen amplio para que todos los conductores lo puedan obtener y así circular por las calles de una manera legal.
Para comenzar, la velocidad máxima seguirá siendo de 25km/h, igual que hasta ahora. Si la velocidad es superior, la policía podrá multar al conductor sin problemas.
El objetivo principal del certificado será el de verificar y comprobar el número de patinetes que circulan por nuestra ciudad. No es realmente un carnet de conducir, solo será un documento con el cual se podrá circular de manera legal. Así será mucho más fácil identificar al propietario en caso de ser necesario.
Las personas que ya tengan el patinete tendrán que darlo de alto una vez que se lancen las reglas, las cuales todavía no se conocen. Mientras que los fabricantes o importadores deberán hacer los trámites para que el patinete esté legal desde el primer momento.
Por otra parte, la DGT podría comenzar a estudiar la posibilidad de recomendar a esos conductores la obtención de un seguro. El seguro se encargaría de hacer frente a posibles daños, pero eso de momento parece ser bastante lejano.