Conozca a Paro, un robot con forma de cachorro de foca. Es mullido, se mueve, gorgojea, cierra sus ojitos cuando se le hace una caricia. Dos microprocesadores y docenas de sensores para sonido, luz, movimiento, tacto, etcétera. Es como un Aibo, pero mucho más tierno. Originalmente desarrollado para hacer de compañero para japoneses de la tercera edad, ha comenzado a utilizarse en Groenlandia en clínicas de tratamiento para la adicción a las drogas.
Planificar, diseñar e implementar servicios de Marketing online y posicionamiento web para ayudar a las empresas a exprimir el potencial de los nuevos medios digitales con las máximas garantías de éxito.
Deja una respuesta