La tecnología y las conexiones no paran de avanzar. Parece ayer cuando el 4G comenzaba a llegar a nuestras vidas, ofreciéndonos velocidades de conexión mucho más rápidas que las velocidades que nos ofrecía el 3G.
Pues ahora el 5G comienza a llegar a nuestro país y ya podemos decir que se ha realizado la primera videollamada en España a través de la tecnología 5G. Es verdad que todo está en pruebas, pero se espera que poco a poco el despliegue de este tipo de tecnología se vaya realizando por parte de las operadoras a partir de este año. Es más, según el calendario, todo indica que la verdadera extensión del 5G en España se realizara a lo largo de 2020.
Mientras tanto, las pruebas cada vez son mayores, y en consecuencia se puede decir que este tipo de tecnología está dando buenos resultados. Por ejemplo, en Barcelona ya se están realizando las primeras pruebas y los resultados están siendo realmente buenos. Gracias a este tipo de tecnología, se consigue disfrutar de una gran calidad, velocidad y estabilidad. Además, como hemos podido saber, gracias a la conexión y velocidad, la videollamada a través de la red 5G es muy fluida.
¿Cuáles son las ventajas del 5G?
Como ya hemos comentado, este tipo de tecnología viene para sustituir a las tecnologías anteriores, es decir, dentro de poco nos vamos a acostumbrar a decir que usamos 5G y el 4G lo vamos a ir olvidando poco a poco.
La principal ventaja de este tipo de tecnología frente a la anterior es que permitirá conseguir velocidades de transferencia mucho más elevadas, de aquí que se espere que el salto sea realmente elevado. Sobre la teoría, se podrá conseguir velocidades de hasta 10 Gbps, lo que hace que incluso algunas redes cableadas se puedan quedar atrás. Eso sí, los usuarios conseguiremos velocidades de transferencia elevados, pero no llegaremos a disfrutar del máximo potencial, por lo menos de momento. Aunque para un usuario normal, tanta velocidad es innecesaria realmente, al menos de momento.
Otro de los puntos positivos del 5G será la latencia. El objetivo es conseguir un mundo más comunicado, por lo que una latencia baja es realmente necesaria para conseguir unos buenos resultados de conexión. Según hemos podido saber, la latencia podría bajar hasta un milisegundo, lo cual no está nada mal. Esto hará que todo sea más ágil y rápido que con el 4G.
Se esta diseñando un sistema en el cual las conexiones tengan rango de prioridad. Es decir, se busca que los dispositivos de seguridad y de urgencia tenga prioridad frente a los que no lo son.
Por supuesto, es una forma de llegar y ofrecer conexión de máxima calidad en las zonas donde ahora las conexiones son casi nulas, como las zonas rurales alejadas de los núcleos urbanos. Es decir, es un buen momento para ofrecer una buena conexión a todo el mundo, ya que se ha demostrado que la fibra es imposible que llegue al 100% del territorio.
Mientras tanto, las operadoras ya están comenzando con las pruebas y a realizar las primeras extensiones de esta tecnología. Pero no comenzará a llegar con fuerza hasta el próximo año, coincidiendo con la llegada de los primeros dispositivos que nos permitirán disfrutar de las ventajas del 5G.